Solo quedarán las muestras de amor
que salen del corazón y del espíritu,
que corren y fluyen como el agua,
que hiende la tierra en cañones profundos.
Sin pedir nada a cambio, por la entrega
de esas muestras de un amor,
sin igual en lo profundo.
 
Solo quedarán las muestras de amor
que son las obras; como hilos de seda
que fueron tejiendo el paño de la vida,
que nos hacía libres mientras se tejía.
Y lo entregamos con delicadeza,
para que diera calor, y protegiera,
al darlo a otros sin medida.
 
Y cuando el agua alimente otras vidas,
y el paño cubra la desnudez de esas vidas,
solo en polvo de amor quedaremos.
Solo muestras de ese amor dejaremos.