Insistimos: el problema principal de España es que no hay relevo generacional, es decir, se muere, no tiene futuro. Y ante este auténtico problemón, los gobiernos del país, tanto el actual de Sánchez como los anteriores del PP, se han dedicado justo a lo contrario de lo que hay que hacer y han fomentado -y de qué manera- el aborto y la eutanasia. En lugar de fomentar la natalidad han fomentado la muerte y así es imposible prosperar.

Según datos publicados este miércoles por el INE, hasta febrero se contabilizaron 53.080 nacimientos en España, un 2,8% más que en el mismo periodo de 2023, lo que es, sin duda, una buena noticia. Por meses, en enero nacieron 27.380 personas, un 1% más que en enero de 2023, y en febrero, 25.699, 1.178 más que en febrero del año anterior.

La mala noticia es que ese aumento es claramente insuficiente para asegurar el relevo generacional. Así, el número de fallecimientos hasta el 29 de febrero fue de 88.243, esto es, 35.163 más que nacimientos. ¿Qué futuro podemos esperar?

Luego está TVE, que en tono triunfal asegura que en los dos primeros meses del año hubo un “repunte” de nacimientos respecto a 2023. Es cierto, aunque es más un mini-reputne (1.464 nacimientos más), pero, en cualquier caso, son muy pocos y claramente insuficientes, como hemos dicho antes.

¿La solución? Instaurar el salario maternal de, al menos, 300-400 euros mensuales por hijo, hasta los 18 años e independientemente de si la madre trabaja fuera de casa o no. Eso sería el mínimo y, en cualquier caso, habría que aprobarlo cuanto antes. Hay mucho en juego.