Tras las desavenencias de las últimas semanas tras la dimisión irrevocable del presidente del Consejo Económico y Social (CES), Caldera ya ha encontrado sustituto. Se llama Marcos Peña Pinto, leridano de nacimiento e inspector técnico de Trabajo y Seguridad Social. Fue consejero laboral en la embajada de España en Roma, secretario general de Salud en el Ministerio de Sanidad y secretario general de Empleo y Relaciones Laborales durante el felipismo. Con el aznarismo, regresó a su profesión de inspector de Trabajo y fue nombrado por el actual Gobierno como miembro del CES en calidad de experto.

En el paquete, el Gobierno también ha nombrado a la nueva secretaria general del CES, Soledad Córdova Garrido, que trabajaba desde mayo de 2004 como directora general de la Fundación del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje, donde también colaboraba su actual jefe. Ha sido Jefa de Servicio de Regulación de Empleo en la Dirección Provincial de Trabajo de Madrid, Secretaria General de Reestructuración de Empresas de la Dirección General de Trabajo.