Ana Botín, durante su intervención grabada
Lo que ha dicho Ana Botín este viernes tiene mucha enjundia, más de la que parece a simple vista. Para empezar, ha dado un dato que pone en evidencia a Pedro Sánchez y su mensaje de que la economía española va como una moto. El dato: la renta per cápita de los españoles ha crecido menos de un 1% en lo que va de siglo, esto es un tercio de lo que creció durante los últimos 25 años del siglo XX.
Para rematar, ha advertido del sesgo que supone centrar el crecimiento en el PIB, como hace el Gobierno. “Crecer es algo más que añadir cada año unas decenas de miles de millones de euros al PIB”, ha afirmado, durante su intervención -grabada- en la última jornada del Wake Up Spain, organizada por El Español.
Hay que volver a hablar de la economía de los españoles, es decir, hay que volver a la renta per cápita como medidor de crecimiento económico, como se hacía en los años 70 y 80 del pasado siglo, hasta que, de la noche a la mañana, se sustituyó por el PIB, que sólo mide el crecimiento de España. Porque, claro, España puede producir mucho, pero si no redunda en los ciudadanos -por ejemplo, porque los impuestos son muy elevados- la economía de los españoles no crece a pesar de que el PIB sí lo hace.
Y ojo, porque esto no le está sucediendo sólo a España, sino a toda Europa, que se está quedando muy rezagada respecto a EEUU y China. Botín centró la mirada en la inversión en Inteligencia Artificial, pero lamentablemente sus palabras se pueden extrapolar a la mayoría de la industria.
Botín ha ilustrado la falta de crecimiento en Europa con la metáfora de la rana que está en una cazuela y no se da cuenta de que el agua se está calentando poco a poco, hasta que es demasiado tarde. Tranquilos, todavía estamos a tiempo de poner remedio, aunque no podemos despistarnos. “Poco a poco, la sociedad se está dando cuenta que la temperatura del agua en la que estamos sumergidos está aumentando, quizás más rápidamente, incluso, que el calentamiento global”, ha señalado.
¿Cuáles son las principales trabas, o los frenos que tenemos en Europa? Aunque no de esta manera, Botín ha arremetido contra las tres burocracias que están asfixiando al Viejo Continente: la fiscal, la regulatoria y la financiera. “La escasa agilidad a veces del modelo europeo para reestructurar industrial nos está pasando factura y corremos el riesgo de quedarnos obsoletos”, ha afirmado. “Tenemos que comenzar a enfriar el agua del bajo crecimiento, revisar nuestras prioridades y objetivos, conseguir que Europa sea capaz de financiar las nuevas ideas de sus empresas y empresarios, y también entender que las empresas, grandes, medianas, todas las empresas, tenemos que transformarnos e invertir más”, ha concluido.
En definitiva, ha arremetido contra la triple burocracia, es decir, hay que bajar impuestos, hay que relajar la regulación para poder competir, por ejemplo, con EEUU y China, y hay que permitir que las empresas se apalanquen para poder crecer, como hacen en EEUU, donde Netflix llegó a tener un apalancamiento del 60% y no pasaba nada, mientras en Europa, el mercado pone el grito en el cielo cuando una compañía supera el 4% de apalancamiento.
Botín no está sola en sus críticas y advertencias. El lunes, en ese mismo foro, Carlos Torres (BBVA) y José Ignacio Goirigolzarri (Caixabank), también dejaron en evidencia al Gobierno y su mensaje económico triunfalista. No, España no va bien y la economía de los españoles está cada vez peor. El PIB puede crecer lo que quiera, que la renta per cápita de Juan Español sigue cayendo.
