La Consejería de Educación de Madrid impide la entrada de menores a su sede.

 

La plataforma Madrid Educa en Libertad ha convocado en la mañana del martes, a representantes de los padres objetores a las asignaturas de Educación para la Ciudadanía (EpC) para cantarle unos villancicos a Lucía Figar, Consejera de Educación de la Comunidad de Madrid. De esta manera hacían saber a la opinión pública que los padres objetores madrileños, integrados en la asociación Madrid Educa en Libertad, estaban disconformes con el Gobierno de la Comunidad de Madrid y, en concreto, con la actitud de la Consejería de Educación respecto al conflicto de EpC.

"Por una parte", asegura María Menéndez, portavoz de Madrid Educa en Libertad, "la presidenta de la Comunidad de Madrid muestra su rechazo a EpC en los medios de comunicación. Por otra, la Consejería de Educación no ha dado ni un solo paso de apoyo a los objetores e incluso permite las presiones y amenazas a los que, en conciencia, siguen oponiéndose a estas asignaturas.

Los padres madrileños estamos indefensos ante las presiones y amenazas de los inspectores de Educación; la Consejería, o no hace nada, o les da la razón (siempre de palabra, nada por escrito) mientras permite el adoctrinamiento en clase".

Además de obsequiar a Figar con unos villancicos, una madre portavoz de Madrid Educa en Libertad ha entregado un escrito en el registro acompañado de un saco de carbón en protesta por la actitud de la Consejería. A pesar de la lluvia, el personal del edificio ha impedido que los hijos de la portavoz de los objetores madrileños (todos ellos menores) entraran a la sede de la Consejería. Y es que los niños, al parecer, son una amenaza para el Gobierno madrileño. EpC, sin embargo, no es un peligro.

Madrid Educa en Libertad