Irlanda decide el viernes 25 de mayo si amplía el aborto. Es decir, decide sobre lo que nunca debe decir un referéndum: sobre el derecho a la vida. Entre otras cosas porque sin derecho a la vida no existe ningún otro derecho, sin aborto no puede existir democracia.

Dos países descatolizados, pero no tanto como España

Van a por los dos países de raigambre católica. Argentina la preserva más que Irlanda, pero ambos, también España, viven de los réditos de sus antepasados, santos y mártires de la Iglesia. El Nuevo Orden Mundial (NOM) necesita que Irlanda y Argentina caigan en la ciénaga del aborto y la contracepción, la muestra más clara en el mundo actual del odio de Satanás a la humanidad.

Irlanda decide el “derecho a la vida”

No soportan su fe ni su antigua fidelidad a la Iglesia y tienen que herir sus conciencias, y la sus sociedades: ahí es donde entra el aborto, que implica odio al hombre y desprecio del débil. El aborto se ha convertido en el motor ideológico del siglo XXI. Si cedemos el derecho a la vida, habremos cedido en todo. 

Y es que el aborto es mucho más que el aborto. Sin aborto no hay democracia porque supone toda una filosofía de vida. Además, el aborto es muy triste: asesina al nonato y destroza a los padres.