
Cabify ha dado una alegría a su fundador y CEO, Juan de Antonio, así como a sus accionistas. Entre estos, se encuentran: la empresa japonesa de comercio electrónico Rakuten (47% del capital); Beatriz González, hija del banquero y ex presidente del BBVA, Francisco González -más conocido como FG; Francisco José Riberas, presidente ejecutivo de Gestamp, así como primer accionista de GAM y a través del holding de su familia de Gestamp y de CIE Automotive, entre otras empresas; Rosauro Varo; Mutua Madrileña y hasta el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Una alegría que se debe a que Cabify ha logrado récord de rentabilidad en 2024.
Esta plataforma española de multimovilidad fundada en 2011 es sobre todo conocida por su negocio de Vehículo de Transporte con Conductor (VTC), y desde entonces ha hecho varias ampliaciones de capital, en las que se han ido incorporando tanto accionistas mayoritarios (como el caso de Rakuten, por ejemplo) como minoritarios (como Riberas y el ICO). Un caso distinto es el del empresario sevillano Rosauro Varo, amigo de Javier Hidalgo (el que fuera CEO de Air Europa cuando fue rescatada por el Gobierno y que es amigo de Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez) y del que también fue socio en Pepephone, una empresa que vendieron a MásMóvil (hoy Masorange) dando un ‘pelotazo’: Varo vendió a Cabify (primero el 30% de su empresa de VTC, Grupo Vector, y luego el 70% restante) a cambio de recibir acciones, otro ‘pelotazo’. Además, Varo ya no es consejero ni vicepresidente de PRISA; sigue en Telefónica (era amigo del ya expresidente, José María Álvarez-Pallete, y se le consideraba pepero), donde ahora opera en nombre de Pedro Sánchez y José Luis Rodríguez Zapatero, y se mantiene como vicepresidente y consejero de Telefónica Audiovisual; y es consejero de Acciona Energía.
Ahora la compañía que dirige Juan de Antonio está en conflicto con el taxi de Madrid… como se pudo ver en una protesta de los taxis hace unos días en las calles de la capital. ¿El motivo? Cabify se ha adjudicado 8.500 nuevas licencias. Los taxistas madrileños han protestado diciendo: “Quieren terminar con el taxi”.
Vayamos a los resultados globales de 2024. Cabify ha disparado su resultado bruto de explotación (ebitda) un 14%, hasta 112 millones de euros, lo que supone “su mayor nivel de rentabilidad”, es decir, un récord; y ha mejorado en los márgenes. Eso sí, los ingresos han descendido un 4,6%, a 760 millones, por efectos del tipo de cambio con el peso argentino,… y sin estos, se habrían mantenido estables. Y en el lado de los ingresos, destacan los de la división Cabify Logistics en Hispanoamérica, que se han disparado un 54%. Claro que el resultado neto habría arrojado unas pérdidas de 9,3 millones por los mayores gastos operativos y de personal.
De Antonio ha recordado que Cabify fue la primera empresa del sector VTC en lograr rentabilidad (lo hizo en el cuarto trimestre de 2019) y que desde 2022 mantenía el punto de equilibro en ebitda. Asimismo, ha presumido de aumentar el volumen de kilómetros recorridos en vehículos eléctricos, reduciendo al mismo tiempo las emisiones, tanto en España como en Hispanoamérica. Y en esto también les son muy útiles las alianzas, como las que ya tienen con las marcas automovilísticas Polestar (que pertenece a Volvo, cuyo primer accionista es el chino Geely) y BYD, la japonesa Nissan o con Iberdrola en infraestructuras de recarga.