Rakuten no va bien, como se vio en sus últimos resultados, pues está en pérdidas y esto le ha obligado ha emprender varias desinversiones. Entre ellas, cabe destacar que ya no cree tanto en el negocio de Vehículo de Transporte con Conductor (VTC) y quiere salir de la plataforma española de multimovilidad Cabify, según apuntan Cinco Días y fuentes financieras.

La empresa japonesa de comercio electrónico que no copia a sus vendedores, como hace Amazon, y quiere dejar de ser primer accionista de Cabify, donde entró en 2015 y a lo largo de estos años ha participado en distintas rondas de financiación. Rakuten se irá prácticamente con lo comido por lo servido, pues prevé ingresar unos 500 millones de euros con la venta, frente a los casi 400 millones que ha invertido en Cabify.

Cabe recordar que esta plataforma española de multimovilidad fue fundada en mayo de 2011 por Juan de Antonio Rubio, que actualmente también es su director ejecutivo. En abril de 2019, Rosauro Varo (quien acaba de ser nombrado consejero de Movistar y reelegido consejero de Acciona Energia, tras salir del consejo de PRISA) vendió Vector, su firma de VTC que tenía 2.000 licencias, a Cabify por 30 millones. En 2020, Cabify tuvo unas pérdidas de más de 42 millones por la pandemia, pero en 2021 las redujo fuertemente un 99,2% a 0,3 millones, por lo que rozó la rentabilidad, y su cifra de negocio alcanzó los 156,5 millones (+30,7%). No hay que olvidar la gran competencia en el sector de VTC que hay en España (Uber, Cabify, Bolt, Voltio -la última en sumarse y propiedad de la aseguradora Mutua Madrileña-, Zity...). Además, el pasado julio, Mutua Madrileña se hizo con el 1,26% del capital de Cabify y empezó a ofrecer el servicio de esta plataforma a sus mutualistas a través de su app.

Con la futura desinversión de Rakuten en Cabify cabe plantearse que la siguiente podría ser Lyft, el gigante estadounidense de VTC. Además, a las salidas se suman las que ya ha hecho en Glovo y en una aplicación similar con sede en Dubai denominada Careem.