En este contexto de crisis mundial del automóvil, Volvo Cars ha anunciado 3.000 despidos, semanas después de haber anunciado menores ventas, ingresos y beneficio operativo en el primer trimestre, y tras registrar un buen 2024. Sin embargo, su principal accionista (el grupo automovilístico chino Geely) ha mejorado sus ingresos y beneficio tanto en el conjunto de 2025 como en las cifras entre enero y marzo de este año.

El antiguo fabricante sueco de turismos (no confundir con su hermano y fabricante de camiones y autobuses, VolvoGroup, que también está controlado con Geely) ha metido tijera en su plantilla, sobre todo en su personal de oficina (donde el ajuste afectará al 15% del total) y en especial en su país de origen (Suecia). En concreto, en un comunicado, ha anunciado 3.000 despidos, de los que 1.200 corresponderán a las operaciones en Suecia y unos 1.000 serán consultores (la mayoría de los afectados también se producen en el país nórdico).

Esta medida forma parte del plan de reducción de costes de unos 1.600 millones de euros que Volvo Cars anunció el pasado abril. “Las medidas anunciadas hoy han sido decisiones difíciles, pero son pasos importantes para construir una Volvo más fuerte y resiliente”, ha señalado su presidente y director ejecutivo, Håkan Samuelsson. Sin embargo, cabe insistir en que los ajustes se producen, a pesar de los buenos resultados que encadena Geely, que también es dueño de las marcas Polestar, Geely Auto, Lynk & Co y Zeekr. Por cierto, recuerden que la crisis mundial de la automoción empezó por culpa del vehículo eléctrico (su caro precio, su baja demanda, sus altos costes de producción y la elevada competencia de las marcas chinas), pero se ha extendido al resto del sector. Y Volvo no ha cambiado sus planes, sino que sigue aspirando a vender sólo vehículos eléctricos. Además, al igual que la mayoría de marcas asiáticas, le gusta vender en España, pero no produce nada,... y en nuestro país sus ventas en el primer cuatrimestre han caído un 25,6%, a 4.539 turismos.

No son los primeros despidos que se conocen en el sector del automóvil en los últimos meses... y posiblemente no serán los últimos. Hasta ahora, se conocían los del grupo alemán Volkswagen (35.000 salidas en Alemania), el japonés Nissan (20.000) y los estadounidenses Ford (4.000 en Europa, pero sin afectar a su única planta en España, que está situada en el municipio valenciano de Almusafes) y General Motors (1.000).