Fuentes de Moncloa aseguran que el presidente Sánchez ni se ha plateado salir del Espacio Schengen, espacio común de seguridad europea que supone la desaparición de las fronteras.

Y esto está directamente relacionado con la euroorden. Que se ha convertido en un instrumento inútil y en una burla: ni urgente ni indiscutible.

La sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) aseguraba la inmunidad de Oriol Junqueras al tiempo que dificultaba aún más la detención de Carles Puigdmeont.

Ni tan siquiera plantea la reforma de la Euroorden… hasta que no sea presidente

De esta forma, las dos características clave de Espacio Schengen, la rapidez y la incuestionabilidad, quedan en entredicho. En otra palabras. Se supone que la UE es un espacio de socios que confían los unos en los otros. Si España solicita la detención de un presunto delincuente prófugo, Bélgica debía haberlo detenido sin hacer preguntas y debía haberlo puesto a disposición de la justicia española sin hacer preguntas. Pues bien, Puigdemont lleva más de un año en Bélgica y le ha dado tiempo a presentarse a las europeas para obtener inmunidad y hasta impunidad.

Pero, a pesar de las bofetadas que Europa propina a España, Pedro Sánchez se niega a salir de Schengen. No puede ofender a los separatistas catalanes: necesita sus votos para ser presidente.

Ni tan siquiera planteará la reforma de la Euroorden… hasta que no sea presidente.

Despierta el hasta ahora dormido, casi inexistente, sentimiento eurófobo en España

Quizás lo más llamativo de todo sea que en España está despertando el hasta ahora dormido, casi inexistente, sentimiento eurófobo. Lógico, desde Bruselas no nos llega otra cosa que humillaciones.