Considera que en su auto de sobreseimiento "defiende el robo de lo más sagrado para un católico". Este miércoles, el juez Fermín Otamendi ha recibido un nuevo revés. En esta ocasión, la asociación Enraizados, ha interpuesto una queja ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por dejar sin sanción al profanador Abel Azcona. En concreto, considera que en su auto de sobreseimiento, el magistrado "defiende el robo de lo más sagrado para un católico, la forma consagrada". Azcona robó 242 formas consagradas y después las usó en una exposición blasfema en Pamplona. Enraizados también exige a la Administración de Justicia que use un lenguaje respetuoso con las creencias religiosas. En su auto, el juez Otamendi calificó las formas consagradas como "objetos blancos y redondos de pequeñas dimensiones", quitando importancia a la profanación cometida por Azcona. Recuerden que el revés para Otamendi llegó unos días después de su fallo, cuando la Fiscalía impugnó el sobreseimiento de la causa al considerar que Azcona despreció y faltó el respeto a "uno de los elementos más sagrados para la religión católica". Por tanto, el artista sí cometió un delito contra los sentimientos religiosos. Cristina Martín cristina@hispanidad.com