Ford ha aminorado la velocidad en el primer trimestre, sobre todo, por culpa del coche eléctrico. Y es que los ingresos han crecido muy poco (+1,3%) y el beneficio neto ha caído un 24%.

Al fabricante automovilístico con sede en Detroit (Michigan, EEUU) le ha ido peor que a su compatriota y vecino de ciudad, General Motors. Los ingresos sólo han crecido un 1,3%, hasta 39.884,9 millones de euros, por menores ventas. En concreto, Ford Blue (división de vehículos de gasolina e híbridos) ha vendido 626.000 unidades (-11%) y Ford Model e (negocio de eléctricos) 10.000 coches (-20%), mientras que Ford Pro (división para clientes comerciales y gubernamentales con una gama de vehículos convencionales y eléctricos y un paquete completo de software, carga, financiación, servicios y soporte) ha sido la única división que ha aumentado ventas, llegando a 409.000 unidades (+21%).

Su división de coches eléctricos (Model e) tiene unas pérdidas operativas de 1.213 millones, lo que se traduce en unas pérdidas de unos 123.137 euros por cada uno de los 10.000 vehículos eléctricos vendidos entre enero y marzo

Ford ha detallado que Model e ha tenido unas pérdidas operativas de 1.213 millones, lo que se traduce en unas pérdidas de unos 123.137 euros por cada uno de los 10.000 vehículos eléctricos vendidos entre enero y marzo. De hecho, dicha división no aporta nada en margen operativo (margen ebit) al grupo en el primer trimestre. Sin embargo, Ford Blue ha registrado un margen ebit del 4,2% y el de Ford Pro ha sido del 16,7%. El negocio de los coches eléctricos no termina de arrancar e incluso baja, y no sólo se ve en Ford sino también en Tesla, entre otros, y además, hay que lidiar con una competencia cada vez más creciente y muchos lo hacen con reducciones de precios.

Esto ha acabado repercutiendo en el resultado operativo (ebit) ajustando de Ford, que ha descendido un 18%, a 2.576 millones; y también en el beneficio neto, que ha caído un 24%, a 1.242 millones. No obstante, han reafirmado sus previsiones anuales porque estiman que los gastos de capital serán ligeramente inferiores a los esperados. Su CEO, Jim Farley, ha destacado que los clientes “quieren vehículos que les apasionen, opciones en la forma de propulsarlos, una calidad que mejore constantemente y un gran valor”,... pero parece que entre estos coches los eléctricos no son la prioridad. Eso sí, Faley espera que todos los eléctricos ganen dinero en los primeros 12 meses. Veremos. 

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