Decíamos ayer... que el problema de Abertis es haber introducido al fondo de capital riesgo CVC en su capital, o haber permitido que Florentino Pérez lo introdujera.
En cualquier caso, como ocurre con otras compañías, el problema del balance de Abertis es ahora el negocio en España. Al menos en dos aspectos se muestra cómo está afectando el deterioro político español a los resultados: la mitad de sus ingresos y de su EBITDA no es español y el 84% del importe de su deuda es a tipo fijo o fijado mediante derivados.
Está claro que en 2010 Abertis ha sufrido mucho con la elevación del coste financiero porque su apalancamiento (endeudamiento relativo) se ha reducido muy ligeramente (pasa del 3,66 al 3,63) y su endeudamiento absoluto apenas crece un 1,5% (300 millones). Sin embargo, los gastos financieros les han subido un 13,6%. Por lo demás, aunque presumen de un vencimiento medio de la deuda de 6,6 años, parece que es un vencimiento corto para una concesionaria de autopistas y explotadora de satélites. Un vencimiento corto no sería problema, sino una ventaja, con expectativas bajistas de tipos de interés, pero lo que ocurre es que son alcistas. Así, aunque la deuda tenga fijado su tipo en un 84% de su importe, lo tiene hasta su vencimiento y luego habrá que refinanciarla a nuevos tipos, seguramente más altos.
Eulogio Lopez
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