• Esas partidas se 'comen' el 43,2% del gasto total. Dicho de otro modo: 188.760 de 436.373 millones de euros.
  • La familia no es lo que importa en los cálculos de Montoro: las ayudas se diluyen en las partidas de Sanidad, que sólo contará con 2.029 millones para repartir también con los créditos transferidos al Imserso.
  • Empleo será el Ministerio con mayor partida presupuestaria: 16.592 millones, 5.824 millones menos que en 2015 (-26%).
  • Los ingresos tributarios estarán marcados por la reforma fiscal y ascenderán a 193.520 millones ( 0,2%).
  • Cataluña, ¡qué casualidad!, será la región más beneficiada en el gasto 'extra' de 10.000 millones para las autonomías y entes locales.
  • RTVE, ¡otra casualidad!, contará con un 17,8% más de presupuesto, hasta los 331,5 millones. Ojo, y dispondrá de otros 61 millones para pagar costes de la deuda.
  • El presupuesto de la Casa del Rey y el sueldo del Gobierno también aumentará, del mismo modo que el salario de los funcionarios, ¡tercera casualidad! de un año electoral.
Ya saben que la noticia de este martes ha sido la puesta de largo de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016 y que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro (en la imagen), se ha rodeado para ello de los principales miembros de su Departamento. Pero la principal nota de color de esos "presupuestos rigurosos", cómo él ha bautizado, es, por aquello de lo inevitable, que cuatro de cada diez euros vayan para pensiones, desempleo y intereses de la deuda. Si lo prefieren, mucho desequilibrio en una economía más presa del pasado que del presente, pero con sonoros guiños a determinadas partidas. Vamos, que son los últimos Presupuestos de Montoro, pero, ojo, en pleno año electoral. Es decir, 188.760 millones de euros se dedicarán a algunos de los asuntos más delicados de nuestra economía y que a día de hoy siguen siendo asuntos pendientes. Esta cuantía supone nada más y nada menos que el 43,2% del gasto total, el cual asciende a 436.373 millones (-0,8%). Sin embargo, la familia continúa importando poco al Gobierno Rajoy. Y es que el Ministerio de Sanidad sólo contará con 2.029 millones, que irán sobre todo a los créditos transferidos al Imserso y al Apoyo a la familia y a la infancia. Una cifra que es un 6% superior (114 millones) a la de los PGE de 2015, pero que convierte al Departamento que titula Alfonso Alonso en el tercero menos favorecido, tras el de Presidencia y el de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Mientras, Empleo será el Ministerio con mayor partida presupuestaria: 16.592 millones, 5.824 millones menos que en 2015 (-26%). De hecho, debido a la mejora del mercado laboral, el gasto en prestaciones cae un 21,7%, mientras el de las políticas de empleo sube un 9,9%. Pero el dinero no es suficiente para que la titular de este Departamento, Fátima Báñez, afronte dos importantes asuntos: la tragedia del paro -a pesar de la última caída histórica interanual, aún hay más de cuatro millones de personas en esa situación- y la viabilidad del Sistema de la Seguridad Social -cada vez hay más pensionistas por el envejecimiento de la población-. Por esto último, nos preguntamos, por enésima vez, si no sería mejor sustituir las cuotas sociales por el IVA -y más cuando la recaudación mejora- en el pago de las pensiones contributivas-. Pero Montoro también se ha acordado de las no contributivas, que paga Sanidad y las autonomías, mandando un aviso a navegantes: "quien defrauda en el IVA perjudica a las pensiones más bajas". Y es que ya saben, al político jienense le gusta erigirse como el caballero andante contra el fraude. El 'número 2' de Montoro, el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, ha regalado los oídos a 'su jefe' al señalar que los ingresos tributarios estarán marcados por la reforma fiscal. En concreto, ascenderán a 193.520 millones ( 6,2%), con aumentos en todos los tipos de impuestos, mientras que la recaudación subirá en 11.264 millones. Por su parte, la secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, ha hecho hincapié en que el techo de gasto es coherente con los objetivos de déficit comprometidos con Bruselas. Entre los cuáles ha destacado que, por primera vez, el de las Administraciones Públicas (AAPP) se sitúa por debajo del 3% (2,8%), lo que supondrá un "gran esfuerzo". Las autonomías y entidades locales estarán más contentas, pues dispondrán de un gasto 'extra' de 10.000 millones, según ha señalado el secretario de Estado de AAPP, Antonio Beteta. De esta cifra, más de 7.000 millones procederán del sistema de financiación y casi 3.000 millones del ahorro en el pago de intereses. También, ha aprovechado para mandar un 'recadito' a Artur Mas: Cataluña será la autonomía más beneficiada, pues su gasto 'extra' será de 2.888 millones. Además, las transferencias del Estado a las autonomías suben un 3,13%, hasta casi los 23.505 millones. Entre las múltiples partidas de los PGE, destaca la de RTVE, que también resulta agraciada en las cuentas previstas para 2016. En concreto, su asignación crecerá un 17,8%, hasta los 331,5 millones. Pero también contará con otros 61 millones para pagar costes de la deuda. El presupuesto de la Casa del Rey y el sueldo del Gobierno aumentarán, debido a la subida del 1% del salario del empleado público. El primero será de 7,86 millones ( 1%), mientras que el presidente del nuevo Ejecutivo tendrá un sueldo de 78.966,96 euros/año (6.580 euros brutos/mes). Por lo tanto, se podría decir que Mariano Rajoy y compañía han barrido un poco para casa, aunque durante toda la legislatura tuvieron el sueldo congelado. Eso sí, ahora sólo queda saber si lo podrán disfrutar o serán otros los agraciados, todo depende de la voluntad del electorado. A simple vista y por las palabras de Montoro pocos son los que dudan del carácter electoralista de los PGE y es que estamos, de manera no oficial, en campaña. Por ello, el titular de las arcas públicas no se ha mordido la lengua y ha afirmado que "las políticas de austeridad nos están sacando de la crisis", mientras que otros países como Grecia están cómo están por no estar haciendo lo que nuestro país. Y es que, en su opinión, los PGE afianzan el crecimiento económico, la mejora del empleo y el mantenimiento del Estado del bienestar. Además, otro recadito para los socialistas, "las facturas ya están pagadas", por si Pedro Sánchez es el próximo ocupante de La Moncloa Montoro no quiere que se encuentre con el mismo pastel que ellos a finales de 2011. Cristina Martín cristina@hispanidad.com