Leo en los medios que a una chica musulmana, Takwa Rejeb (en la imagen), en el colegio, no le dejan llevar la cabeza cubierta con el pañuelo musulmán. Conste que la prohibición me parece una chorrada pero me sorprende el dramatismo que le echa la susodicha: "es indignante que me impidan formarme por el pañuelo musulmán", y más extraño aún que el periodista no le pregunte si los cristianos pueden exhibir sus símbolos religiosos en los países islámicos. Porque la palabra clave con los mahometanos es esa: reciprocidad. En el entretanto, el BOE respalda la enseñanza del islam en las escuelas españolas. Igualito que en Arabia. Por cierto, lo que no está garantizando derechos en la enseñanza del cristianismo en las escuelas españolas. Hispanidad redaccion@hispanidad.com