El gigante anglo-norteamericana, 19 millones de clientes en los cinco continentes, se mantiene en la misma línea, a contracorriente del reto del sector: no quiere entrar en la telefonía fija algunos dicen que hace de la necesidad virtud-, sino que pretende ofrecer telefonía fija con tecnología móvil.

A esto se le llama movilizar el fijo, por lo que ha lanado la mercado un producto llamado oficina Vodafone, especialmente dirigido a autónomos, profesionales y PYMES, por el cual el cliente puede mantener su número fijo portándolo a la red móvil de Vodafone. Es el comienzo de una serie de servicios que tienen un mismo objetivo : que todas las operaciones: llamadas a fijo o a móvil, así como Internet, se realicen a través de la red móvil de Vodafone.

El proceso, todo por móvil, no ha hecho más que empezar. El reto consiste en rebajar los precios de la telefonía móvil, y que se aya igualando al fijo, cosa no muy sencilla.