El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, rectificó parcialmente su propio decreto de dispensación gratuita de la píldora del día después. Se seguirá dispensando a niñas a partir de 10 años, aunque hasta los 16 será necesario el consentimiento paterno. La rectificación es parcial, porque -tal y como recuerda el semanario Alba- los propios fabricantes de la píldora no recomiendan su ingesta a mujeres menores de 16 años.

Por su parte, el conseller de Sanidad de la Generalitat valenciana, Vicente Rambla, afirmó en el pleno de las Cortes valencianas que el gobierno regional no financiará la dispensación gratuita de la píldora postcoital. Y lo mejor son las razones. Rambla considera que deben seguirse otras fórmulas para prevenir los embarazos no deseados antes que la utilización generalizada de la píldora.

La píldora del día después supone un pelotazo hormonal que atenta gravemente a la salud de las mujeres. Pero es que además, en el caso de mujeres en formación, podría alterar gravemente su propia salud reproductiva. Y por si fuera poco, resulta que la píldora del día después es abortiva, tal y como demuestra el consenso de la comunidad científica. Así que, obviamente, mejor buscar otras fórmulas para prevenir antes que frivolizar el aborto químico en los centros de jóvenes del ayuntamiento capitalino.