Según el último barómetro la mujer española es el especimen humano que más vive en la Unión Europea, con una esperanza de 83,9 años. Además, acumula más títulos académicos que la media de la Unión y, eso sí, a pesar del aumento de las natalidad –gracias a las extranjeras residentes- es la que menos hijos tiene de la Unión Europea. Lo bueno de la encuesta es que muestra un panorama diáfano y un diagnóstico inequívoco.

Por cierto, los títulos académicos no parecen haber servido para forzar la integración en el mercado laboral. España se caracteriza por la sociedad de "dos sueldos, ningún hijo", pero es que, además, la diferencia entre hombres y mujeres desempleados es mayor en España que en Europa.