Ayer informamos sobre las dificultades de las empresas españolas en Santo Domingo. Tanto Unión Fenosa como FCC preferirían, aunque no lo digan oficialmente, que la oposición política de Lionel Fernández desbancara al partido del actual presidente, Hipólito Mejías, en las próximas elecciones del 16 de mayo. Es más, el partido gobernante tiene primarias en marzo. Y la situación, aunque no tan caótica como en la vecina Haití, no deja de ser un pequeño desastre. La empresa eléctrica española Unión Fenosa vendió, seis meses atrás, sus dos compañías distribuidoras. Ahora tiene dos plantas de generación, por fuel, que producen unos 150 megawatios, un 10% del total de energía del país. Por el momento, no piensan venderlo, pero lo cierto es que la preocupación crece. Mejías preside un régimen bastante corrupto. FCC ha rescindido ya su contrato de recogidas de basuras, ante los impagos del ayuntamiento de la capital, Santo Domingo. 

Y todo esto obedece a la inseguridad jurídica, a la que se refirió Aznar ante los periodistas hispanoamericanos, que acudieron al periplo organizado por el BBVA. Por cierto, que ha sentado bastante mal en el resto de Hispanoamérica la apuesta decidida del banco "vasco" por México.