Toda la prensa española habla hoy de la noticia adelantada ayer por Hispanidad, sobre el sobreseimiento, ya casi definitivo, del caso de las cesiones de crédito del Banco Santander

El Mundo lo relata con más precisión que ningún otro. En definitiva, la acción popular ha quedado herida de muerte; ahora deberán ser el damnificado o la Fiscalía quien actúe en los casos de procedimiento abreviado. Así, en el caso de las cesiones de crédito el damnificado era la Hacienda Pública, pero el fiscal, tanto con el PP como con el PSOE, y el abogado del Estado se pusieron de parte de Botín y contra la juez instructora, Teresa Palacios. Eso sí, a los titulares de cesiones sí que les persiguen por los juzgados de España los fiscales de zona. En otras palabras, se persigue al titular y se deja libre al banquero que les posibilitó el presunto delito y que se benefició con depósitos llegados desde el dinero negro.

Pero es que, además, existe una confusión muy habitual sobre los dos casos más sonados de elusión fiscal de la España democrática: las primas únicas de La Caixa y las cesiones de crédito del Banco Santander. Confusión que afecta, por ejemplo, a un lector anónimo, quien aseguró que Emilio Botín pagó al Fisco. En forma alguna La Caixa sí pagó sus deudas con Hacienda por los seguros de prima única, pero el Santander no ha pagado ni un euro. Y eso que las primas era una diferencia de criterio sobre si se trataba de un seguro o de un producto financiero, mientras que en las cesiones nadie duda de su ilegalidad, en un proceso donde se llegó a inscribir cesiones a nombre de fallecidos.