Si lo hace, paralizaría la OPA y la condenaría al fracaso. Sin embargo, no es lo habitual en esta instancia jurídica comunitaria. Lo cierto es que si no lo impone puede decirse que la etapa política de la OPA tocará a su fin en cuanto hable el vicepresidente del Gobierno, Pedro Solbes.

Por su parte, el Gobierno está empeñado en acelerar los trámites. Se insta a Solbes a hablar cuanto antes. Las cosas no han ido como esperaba el vicepresidente, por la sencilla razón de que el dictamen de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) no tiene nada que ver con el del Tribunal de Defensa de la Competencia. Solbes, por tanto, tendrá que responsabilizarse de su decisión. Decida lo que decida, contrariará a uno o a otro.