Sr. Director:

He pasado unos días en París y vi delegaciones españolas entre la plaza de Charles De Gaulle y la plaza D'Alma. Mi sorpresa llegó cuando paseaba entre la isla donde está Notre Damme y el Boulevard Saint Michel que me encuentro la casa de Cataluña, es normal, como encontrarse la casa de Asturias. Sin embargo, observo que no hay bandera española, solo la catalana y en las cristaleras aparece Generalitat de Catalunya y traducido al francés como Government de Catalogne.

Volviendo a España oigo declaraciones de D. Ernesto Benach en catalán ante el gobierno de California en catalán y sin la bandera española.

Yo entiendo que haya comunidades, nacionalidades y lenguas cooficiales dentro del estado español, ¿pero fuera? ¿Fuera no es solamente España? ¿Y no conocen a España porque se habla el castellano? ¿El Estado español no es soberano para designar quién le representa y quién no le representa fuera de sus fronteras? ¿Se imaginan que en Madrid hubiera una representación del gobierno de Córcega? Francia, país de la libertad, fraternidad e igualdad no lo permitiría, ¿por qué el Gobierno y la Corona se mantienen impasibles? ¿Acaso cualquiera puede establecer relaciones diplomáticas sin control gubernamental?

Si es así, me temo que nos queda poco crédito como nación frente a las demás, donde se permite que cualquiera se autodenomine nación cuando el que lo oye ya sabe que España es la nación y por tanto, su conclusión será que algo huele a podrido como diría Hamlet

Agustín Valencia Gil-Ortega

agustinvalencia@yahoo.es