Como hemos informado, el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Puigcercós, exigió 695 millones de euros más de inversiones en Cataluña para cumplir con el compromiso del Estatut de invertir en infraestructuras el equivalente al peso de Cataluña en el conjunto de la economía, un 18,8%. Tiene gracia lo de los 695 millones, porque todos están de acuerdo en que no han hecho los cálculos al milímetro y da la impresión de que Puigcercós ha tomado nota de la estrategia comercial de los grandes almacenes a la hora de la fijación de precios.
Por su parte, el portavoz de IU, Joan Herrera, también considera que para cumplir con el compromiso del Estatut habría que invertir 600 millones de euros más. Y el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, se muestra partidario de cumplir con lo aprobado en el Estatut, pero sitúa las diferencias con ERC e IU en el plano metodológico, que siempre queda bien. Vamos, que han cogido la calculadora equivocada. Muy divertido.
El caso es que en la mañana de este jueves, le han preguntado a Montilla sobre el particular. La pregunta tenía su aquel, porque le obligaba a situarse entre los catalanistas o el Gobierno. Y como es lógico, no quería ubicarse ni en un sitio ni en el contrario, así que lo mejor es no contestar. Voilá. No me apunta a la discusión sobre los números. ¿A que está bien?
Además, Montilla considera que todavía no se ha aprobado el proyecto y que por tanto hasta que el gobierno no presente el anteproyecto, no parece tener mucho sentido entrar en estos debates. Cintura ejercitada y a otra cosa mariposa. Eso sí, el candidato socialista a la presidencia de la Generalitat, manifiesta su absoluta seguridad de que Zapatero cumplirá el compromiso del Estatut de invertir en Cataluña el equivalente a su peso en el PIB nacional.
