A estas alturas ya sin ningún pudor con el cinismo que le es propio en materia de relaciones con la Iglesia el Ejecutivo Zapatero ha financiado manifestaciones de gays en Barcelona así como todo tipo de cursos, seminarios y concentraciones a favor del gaymonio coincidiendo con la próxima visita de Benedicto XVI para celebrar, precisamente, la Encuentro Mundial de la Familia (1 al 9 de julio de 2006). Todo tipo de grupúsculos de homosexuales y lesbianas se están concentrando en Valencia financiados por la Administración Pública y con el altavoz mediático gubernamental y progubernamental a su servicio. El diario El País ha dedicado dos páginas enteras en su edición del lunes a la diversidad familiar eje de las manifestaciones pagadas de Valencia, que pretende tener su punto culminante en un acto homo coincidente en tiempo y espacio con la ordenación de sacerdotes en Valencia.

No sólo eso, en medios clericales y también policiales se habla de escuchas telefónicas a miembros del episcopado así como de micrófonos instalados en los edificios que utilizará Benedicto XVI y miembros de la curia que le acompaña.

Hablando de cinismo Hispanidad ha podido confirmar la información publicada por el Diario La Gaceta de los Negocios en el sentido de que el Vaticano se ha negado a recibir a la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, quien había solicitado una nueva audiencia.