El republicano Brad Little (en el centro de la imagen): “Me decepcionó que la Legislatura dejara pasar la oportunidad de promover una legislación significativa para proteger verdaderamente a los niños de los daños de las redes sociales"
Decíamos en Hispanidad, que Florida marca la pauta. Ron de Santis firmaba en su día la ley que prohíbe adoctrinar a los niños en la ideología de género en las escuelas. El gobernador republicano aseguraba, además, que “en el estado de Florida los padres tienen un papel fundamental en la educación, en la salud y bienestar de sus hijos”.
En la misma línea de Florida, el gobernador de Idaho, el republicano Brad Little ha firmado una ley que prohíbe a las bibliotecas públicas y escolares proporcionar a los menores materiales considerados «nocivos», incluidos aquellos con contenido sexualmente explícito. Esta medida se suma a una serie de leyes pro-familia aprobadas recientemente.
La ley, denominada HB 710, se aplica tanto a bibliotecas independientes como escolares, prohibiendo el acceso de menores a cualquier material considerado «dañino». Este incluye representaciones visuales de desnudez, conducta sexual o abuso sadomasoquista, así como descripciones escritas que involucren excitación sexual, conducta sexual o abuso sadomasoquista.
La ley también establece que si el personal de la biblioteca omite algún material, debe proporcionar un «formulario fácilmente accesible» para que los usuarios puedan solicitar la revisión del mismo si lo consideran inapropiado para menores. Tras esta revisión, el material deberá ser trasladado a una sección exclusiva para adultos. El incumplimiento de esta disposición podría enfrentar a la biblioteca a demandas civiles.
Tal como recoge Infovaticana, informa el diario Idaho Press, al firmar la ley, el gobernador de Idaho, Brad Little, compartió el «deseo de los coautores de mantener materiales verdaderamente inapropiados fuera del alcance de los menores», añadiendo que considera más preocupante la facilidad con que los niños pueden acceder a contenidos no aptos mediante dispositivos electrónicos.
Little dijo que estaba orgulloso de firmar el Proyecto de Ley 498 de la Cámara de Representantes este año, que requiere verificación de edad en sitios web de pornografía. Dijo que el proyecto de ley era "un buen comienzo". “Me decepcionó que la Legislatura dejara pasar la oportunidad de promover una legislación significativa para proteger verdaderamente a los niños de los daños de las redes sociales, como pedí a este organismo que hiciera durante mi discurso sobre el estado del estado y el presupuesto en enero”.
Esta medida se suma a una serie de leyes profamilia aprobadas recientemente
La Asociación Americana de Bibliotecas, que se opone a cualquier limitación significativa en el acceso de los niños a material para adultos, defiende en su Carta de Derechos de la Biblioteca que el acceso no debe ser restringido por motivos de origen, edad o puntos de vista.
Previamente, Idaho y el gobernador Little también han promulgado leyes que prohíben los procedimientos de transición de género para menores, los mandatos de pronombres transgénero en las escuelas, la participación de varones en competiciones deportivas femeninas y el uso de baños femeninos por parte de estudiantes varones.
Pero, también en España se han dado situaciones relacionadas con contenidos no aptos para niños, difundidos en bibliotecas públicas. En Burriana (Valencia) Vox pidió retirar libros LGTBI y de educación sexual de la biblioteca.
Y en Dos Hermanas, Sevilla, el PSOE distribuyó libros como ‘El semen mola’ o ‘Infancia y transexualidad’, con ilustraciones explícitas sobre "las mil formas del pene" porque "¡Tu pene es precioso tal como es!".