• E incluso el alquiler de la vivienda de las familias más necesitadas.
  • El primer reparto previsto se realizó aplicando el indicador Arope, que además del riesgo de pobreza, tiene en cuenta la baja intensidad de empleo en los hogares.
  • Este indicador también valora la carencia material severa, como no poder ir de vacaciones, no poder comer carne, pollo o pescado cada dos días, no poder calentar la vivienda, no poder tener coche, lavadora o teléfono o no disponer de 650 euros para gastos imprevistos.
  • Continúa la polémica entre las CCAA sobre el reparto y el Ministerio de Sanidad dice que ellas fijen nuevos criterios. 
Se da en España una polémica en este momento entre las comunidades autónomas sobre el reparto del fondo extraordinario creado para luchar contra la pobreza infantil, dotado con 17 millones de euros.

El dinero de este fondo se va a destinar a necesidades básicas, como alimentación, ropa, productos de aseo, medicamentos e incluso el alquiler de la vivienda de las familias más necesitadas.

En principio, las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla son las que recibirán más cantidad, con 1,30 y 1,27 millones cada una, seguidas de Canarias (1,23 millones), Andalucía (1,20 millones) y Extremadura (1,16 millones), mientras que el País Vasco y Navarra han quedado fuera del reparto.

Pero el reparto planteado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad no ha gustado a algunas comunidades. Por ejemplo, a Andalucía. Porque según su consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, la situación "es absolutamente desequilibrada" porque "no podemos tener un presupuesto igual para más de 636.000 menores (1,2 millones) y que en Ceuta tienen para 20.000 menores (1,3 millones).

Andalucía se queja de que, según el reparto previsto, cada menor andaluz en riesgo de exclusión recibiría 1,90 euros frente a los 153,02 que recibirían los menores de Ceuta o los 55,30 euros para los de La Rioja. Cataluña, la Comunidad de Madrid y la Comunitat Valenciana también salen perjudicadas en el reparto, con 2,25 euros, 2,65 y 3,43 euros por niño, respectivamente.

En principio, la distribución del fondo se hizo aplicando el indicador Arope (siglas de At Risk Of Poverty or social Exclusión) que es el que figura en la estrategia Europa 2020 de la Unión Europea, un indicador que, además del riesgo de pobreza, tiene en cuenta la baja intensidad de empleo en los hogares y la carencia material severa, como no poder ir de vacaciones, no poder comer carne, pollo o pescado cada dos días, no poder calentar la vivienda, no poder tener coche, lavadora o teléfono, o no disponer de 650 euros para gastos imprevistos, entre otros factores.

Por la polémica generada, el Ministerio de Sanidad revisará junto a las comunidades autónomas los criterios utilizados para el reparto del fondo; pero, según el propio Ministerio, serán las autonomías las responsables de pactar entre ellas los nuevos criterios, que una vez acordados serán revisados por el Ministerio.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com