Así lo califica el Consejo Económico y Social (CES): No somos conscientes ni de la gravedad ni de la tragedia

 

Presentación de la memoria del CES en los desayunos del Foro de la Nueva Economía. Comparece su presidente, Marcos Peña que denuncia el incremento devastador del paro en el 2009: nada menos que 1.369.700 empleos perdidos. No somos conscientes ni de la gravedad ni de la tragedia, señala. ¿Cuál es su propuesta sobre la reforma laboral? Ninguna, porque él es el presidente del CES y el CES no ha emitido informe. Sí sale al paso de la defensa del sindicalismo. Recuerda que se han sometido a las elecciones sindicales con el 80% de participación y que han sido los únicos que durante dos años han estado buscando un acuerdo. No ha habido ni coherencia institucional ni acuerdo político y se pide que haya resultados en el diálogo social, se queja. Además, Marcos Peña se felicita por la profesionalización y calidad de los negociadores sociales. Vamos que el CES se ha convertido en una correa de transmisión de las centrales sindicales.

No obstante los datos son preocupantes. En el 2009 hubo 3 millones de personas que recibieron algún tipo de prestación por desempleo, un 31% más que el año anterior. ¿Hasta cuándo?, se pregunta Peña. Además, en el 2009 se produjeron cerca de medio millón de despidos sin causa ni motivo. En cuanto al paro femenino se ha estabilizado con el masculino como consecuencia de un efecto compensación tras las pérdida del empleo del marido. Estrategia de disponibilidad, se llama. Muchos en contratos a tiempo parcial, ocupados en un 80% por mujeres. Del total de contratos parciales, el 75% son no deseados, según el presidente del CES.

Es consciente de los riesgos de la demografía y del paro de larga duración, pero también lanza un mensaje de optimismo: jamás hemos tenido una generación mejor formada y jamás hemos tenido un nivel de renta tan alto; tenemos mimbres para salir de la crisis, concluye.

Además, ha señalado lo siguiente.

Política de empleo: Por ser generoso los éxitos han sido bastante moderados; tenemos que trabajar en una mayor cooperación interna y externa de nuestros servicios públicos de empleo.

Huelga general: Si la han convocado, tendrán sus razones; nadie convoca una huelga general por capricho y a nadie le cuesta más que a UGT y CCOO por el riesgo, el desgaste y su deseo de no convocar.

Riesgo de recaída: La recuperación será lenta y no exenta de riesgos.

Seguridad Social: Ha sido la única que en el 2009 ha permanecido en superávit y ha soportado la cohesión social y la demanda interna.

Debate entre estímulos y consolidación: Se ha resuelto a través de una austeridad austera.

Conflictividad: En el 2009 ha habido más huelgas pero menos horas perdidas; la cultura del consenso deja poso.

G-20: Uno de nuestros principales problemas es que tenemos efectos globales gestionados localmente; necesitamos soluciones más coordinadas porque la economía está interconectada.

Desplazamiento de la actividad: Para desgracia de los europacéntricos, hay otros polos que han tomado el relevo; por ejemplo, en Brasil se han creado ya un millón de puestos de trabajo.

Negociación colectiva: En España hay 4.800 convenios de empresa y 4.200 empresas con más de 200 trabajadores; para que sepamos de qué hablamos cuando hablamos de la flexibilización de la negociación colectiva.

Sindicatos: Observo últimamente demasiado comentario irónico sobre los sindicatos y deberíamos de tener menos ironías y más reconocimiento; incluso agradecimiento.

Pensiones: La clave está en la conciliación; un dólar en guardería reporta 12 dólares a la sociedad.

Incremento del IRPF en las CCAA: Camina en la buena dirección de la corresponsabilidad de los ingresos.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com