Si algún iluso mandatario Iberoamericano piensa que Europa es su aliado natural o que podría ayudarle a salir de la situación en la que se encuentra, puede ir desengañándose y alguien se lo tenía que decir. De ello se encargó el ministro Moratinos: Desgraciadamente, y hay que decirlo a nuestros socios iberoamericanos, Iberoamérica no está en la agenda europea. Sólo se preocupan de las grandes crisis. En otras palabras, ya tenemos bastante con lo nuestro, búsquense la vida. Fue un baño de realidad de entrada. Así comenzó esta Cumbre. Mucho nos tememos que esta magna reunión, aunque se insista que no, será para la foto. Esto recién comienza.