• El ministro Jorge Fernández asegura que se trata de la mayor célula de captación de reclutas occidentales para hacer la 'guerra santa' capturada hasta el momento.
  • Acuerdo España-Reino Unido para que las islas del canal dejen de actuar como paraísos fiscales. Ya sólo falta Gibraltar.
  • El mundo anglosajón y calvinista no puede desligarse del fraude legal de los paraísos fiscales; es connatural a él.
  • Huella de carbono: ¿nuevas cargas burocráticas y medioambientales a las empresas mejorarán su competitividad ¿Seguro
  • Mejora de los centros de internamiento de inmigrantes: aumenta el coste de 8 a 11 millones de euros. Pues hombre,  no parece mucho.

Consejo de Ministros del 14 de marzo. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría (en la imagen junto al ministro del Interior, Jorge Fernández), en su habitual estilo de caricia-cachete, asegura que el informe sobre Reforma Fiscal del grupo de expertos dirigidos por Manuel Lagares es buenísimo, aunque, eso sí, resulta que no es la decisión última del Gobierno. Y a renglón seguido Soraya marca posición: que conste que el Gobierno no aceptará la recomendación lagariana de que la vivienda habitual en propiedad tribute en el IRPF. Menos mal.

En cualquier caso, nada nuevo: ya saben ustedes que esas comisiones dicen lo que el Gobierno quiere que diga. Pero alguna discrepancia debe haber para recalcar la independencia de las partes. Claro que sí.

Más asuntos del Consejo. Hemos aprobado tres acuerdos de intercambio de información sobre fraude fiscal y penal. Las islas del Canal (Jersey y compañía) comenzarán a pasar información sobre el dinero gris, o negro, en ellos depositado. A cambio, seremos buenos y les quitaremos la etiqueta de paraíso fiscal. Vamos, que ya sólo falta Gibraltar, que es un paraíso fiscal como la copa de un pino.

Es bueno esto de luchar contra los paraísos fiscales, lo malo es que el mundo anglosajón y calvinista no pude desligarse del fraude fiscal legalizado: es connatural a él.

Más medidas. La vicepresidenta se nos vuelve verde y habla de la huella de carbono. Que las empresas se someten a evaluación sobre los gases de efecto invernadero que emiten a la atmósfera y que colaboren a plantar bosques que son los grandes purificadores del aire (esto es una gran verdad). Ahora bien, el problema llega cuando Sáenz de Santamaría asegura que el registro de la huella de carbono mejorará la competitividad de la empresa. Oiga no: nuevas cargas burocráticas y nuevos costes a las empresas, no enojar su competitividad. Lo mejor que haría el Gobierno español sería imitar en esto a los americanos y abandonar a los europeos. USA se rige por la máxima de que lo que no está expresamente prohibido está permitido. Es decir, se lo pone fácil, no difícil, a sus empresas.

A Soraya le acompaña el titular de interior, Jorge Fernández. Nos cuenta su nuevo proyecto para mejorar los centros de internamiento de inmigrantes (CIE), cuyo presupuesto aumenta desde los 8 a los 11 millones de euros. Pues hombre, no es mucho. Incuso podíamos ser más generosos.

La noticia más importante: Jorge Fernández informa de la detención de un banderín de enganche de yihadistas. Siete (tres en Melilla, tres en Marruecos, 1 de Málaga) detenidos. Entre ellos, un belga de nacionalidad española, el jefe, que se dedicaba a reclutar luchadores por Alá, destinados a hacer la guerra santa en Siria, Afganistán, Libia, etc.

Las preguntas son dos: ¿De dónde sacan el dinero estos tipos Y lo más importante: como temen muchos, entre otros la inteligencia militar española, ¿se han convertido las plazas africanas de Ceuta y Melilla en viveros de yihadistas y terroristas islámicos Son españoles, nacidos en Ceuta y Melilla, descendientes de marroquíes… que por ejemplo, completan más de un tercio de las tropas regulares españolas en las dos plazas.

Fernández no entra en la cuestión.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com