Ante los reiterados atentados contra la dignidad de la Iglesia y las burlas hacia la fe que se vienen dando en las últimas semanas, el Observatorio Antidifamación Religiosa desea manifestar lo siguiente:
Las ofensas y ridiculizaciones de la fe católica, los ataques verbales que sufrimos los católicos en España, ya han pasado de los medios de comunicación y los partidos políticos a la sociedad civil, de manera que grupos espontáneos se lanzan a la violencia directa.
Ya denunciamos hace pocas semanas el intento de quema de una parroquia de Majadahonda. Hoy debemos lamentar los insultos que han sufrido un sacerdote y las feligresas que le acompañaban en el municipio del sur de Madrid de Pinto.
Cuando se dirigían a celebrar la Misa dominical de 9:00, un grupo de jóvenes que estaba en un bar cercano al convento de las MM. Capuchinas ha comenzado a increparles e insultarles, sin haber mediado provocación alguna.
Sospechamos, y lamentamos, que la única provocación que ha excitado a este grupo ha sido la vestimenta negra del sacerdote y el hecho de que un grupo de señoras tuviera fe y fuera a Misa esta mañana.
Ya hemos denunciado el proceso por el que se ridiculiza la fe, luego se pasa al ataque verbal y luego al ataque físico. La prueba palpable de esto la hemos visto hoy cuando este grupo de jóvenes ha gritado, entre otras cosas, que la Iglesia se aprovecha de las pobres viejas y que la iglesia debería arder.
Esperemos que estos insultos se queden en simple palabrería y no pasen a actuar.
Por todo lo cual, este Observatorio insta a las autoridades públicas a que inicien una investigación y promuevan el pueblo de Pinto una buena imagen de la Iglesia y no se dediquen a denigrarla. Animamos al Ilmo. Ayuntamiento de Pinto a que apruebe una moción de condena de los actos acaecidos y le expresen a este sacerdote su más sincero apoyo y cercanía.
Antonio Alonso Marcos
Presidente del Observatorio Antidifamación Religiosa
www.oadir.org
