Sr. Director:
La inversión extranjera se ha desplomado un 60% en Cataluña en lo que llevamos de 2014, cayendo a un mínimo histórico desde 1993.

Nadie puede decir que sea sorprendente. Llevamos meses con la inestabilidad política a cuestas y unos partidos políticos que promueven una acción tan radical, extremista y de máximos en cualquier parte del mundo como una secesión ilegal.

Y está situación acaba creando, obviamente, inseguridad y desconfianza entre los inversores extranjeros que han decidido de manera mayoritaria paralizar sus inversiones en Cataluña.

Artur Mas quiere pasar a la historia y en la economía catalana ya lo ha conseguido: máximo histórico de deuda y mínimo histórico de inversión.

Antonio Peiró