Los pocos préstamos que se conceden se están cerrando al 30% mientras se suspenden las líneas de crédito

El BBVA mantiene pésimas relaciones con la Casa Rosada. Cristina Fernández aún no ha olvidado el comentario machista de FG en Madrid

Los AFJP (fondos de jubilación privada) constituían la bolsa de ahorros importante de Argentina, rentabilizada a través de gestoras en poder de los bancos. De ella, la más importante, Consolidar, del BBVA.

Tras fracasar en su intento de meterle la mano en el bolsillo a los agricultores, el matrimonio cleptómano formado por Néstor Kirchner y Cristina Fernández se volvió hacia los fondos privados de pensiones, una bolsa de dinero que, por ley, debe invertir el 80% en deuda pública argentina mientras el otro 20% financiaba a empresas privadas.

Con la nacionalización, la reacción de los bancos ha sido inmediata: cerrar el grifo del crédito. Los pocos préstamos o línea que se conceden se firman a un tipo de 30%. Conclusión: el tejido industrial argentino está, sencillamente hundido.

Se suponía que los bancos extranjeros, por ejemplo el BBVA y el Banco Santander traerían liquidez de fuera para sustituir al dinero que ahora administran desde la Casa Rosada, pero los bancos no están por la labor.

Especial significación tiene Consolidar, propiedad del BBVA, el mayor gestor de pensiones privadas de Iberoamérica, por cuanto la presidenta Cristina Fernández no perdona a Francisco González su comentario machista sobre su capacidad para regir el país. Un comentario realizado en plena campaña electoral, durante una visita de Fernández a la patronal CEOE.