En Argentina, los 'Fernández y Fernández', es decir, los expresidentes Alberto Fernández y Cristina Fernández, parece que tienen problemas con la justicia.

Como se recordará, Cristina (que fue la vicepresidenta de Alberto entre el 10 de diciembre de 2019 y el 10 de diciembre de 2023) fue condenada en 2022 en primera instancia a seis años de prisión e inhabilitación vitalicia para ejercer cargos públicos, bajo el cargo de defraudación al Estado. La sentencia no es firme todavía y tiene dos instancias de apelación.

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Y ahora resulta que es Alberto Fernández (presidente entre 2019-2023) el que tiene problemas con la justicia. Está acusado de  malversación de caudales públicos, violación de los deberes del funcionario público y abuso de autoridad. Más en concreto, se sospecha que el expresidente habría favorecido a personas cercanas en la contratación de seguros del Estado y más cuando su Gobierno impuso la obligatoriedad de contratarlos de manera exclusiva con la aseguradora del Banco Nación, de propiedad pública. 

Por todo ello, el juez federal Julián Ercolini, que lleva este caso, ha congelado sus activos y ha levantado el secreto fiscal y bancario sobre sus cuentas.

El ex presidente asegura, claro, que estas acusaciones de corrupción son falsas: "Si se investiga, se van a dar cuenta de la mentira que es todo esto. No quiero que nadie crea que me estoy escondiendo de algo. No me llevé ni un centavo de nada ni hice negocios con nadie. No me llevé del Estado ni una goma de borrar. Solo me llevé el enorme honor de ser Presidente de los argentinos".