Era el as que tenía en la manga. Muy pobre. Todo lo que se le ocurre a Zapatero es anunciar una Comisión liderada por Salgado y de la que formaran parte tanto Blanco como Sebastián. Esta Comisión debería ser la encargada de buscar los acuerdos con los grandes grupos parlamentarios en los temas señalados como prioritarios: empleo, política industrial, sostenibilidad de nuestro modelo productivo, competitividad, consolidación fiscal y reforma del sistema financiero.
En realidad se trata de la política de Napoleón: nombrar una Comisión para que los problemas se pudran. El francés era más fino: Si quieres que los problemas se eternicen, nombra una Comisión. Tiene el copyright, aunque posteriormente Franco lo hizo suyo: Las comisiones son como las putas, hablan mucho, pero luego no paren nada. Pues eso. Bla, bla, bla. Rajoy se lo ¡ha espetado: Ud. viene con muchos planes y cada vez es peor. Pero a Zapatero no se le ocurre otra cosa mejor para ganar tiempo.
Por cierto que el as en la manga de Zapatero deja a los pies de los caballos al portavoz socialista José Antonio Alonso que supuestamente había iniciado una ronda de contactos para buscar acuerdos para el pacto. Es el modelo Zapatero: anuncios improvisados y desautorizaciones a los suyos permanentes. El resto, a tragar. Un modelo de mando imperial y un tanto adolescente que ya empieza a cansar a más de uno. Y de dos.
