Desde la II Guerra Mundial no se alcanzan estos porcentajes. Alemania terminó enero con más de 5 millones de parados, lo que supone el 12,1% de la población activa.
Es una cifra psicológica impactante, una cifra pésima cuando parecía que el país más poblado de la Unión Europea comenzaba a ver la salida del túnel, con un récord de exportaciones que tranquilizaba al canciller Schröder.