El excura José Manuel Vidal se ha convertido en el portavoz no oficial del nuevo arzobispo de Madrid, Carlos Osoro (en la imagen). Él nos dice qué piensa el arzobispo y cómo hay que interpretar sus palabras. Su compañero de equipo, el no menos vaticanólogo Jesús Bastante, se ha convertido en biógrafo y cronista oficial del obispo, cargos tan mediáticos como poco institucionales.

Son dos pícaros que, desde Internet, pretenden ejercer magisterio eclesial y darnos catequesis de cristianismo moderno, es decir, modernista. Sus críticas acerbas, y bastante mentirosas, contra el cesado Rouco Varela eran tan duras como elogiosos sus ditirambos hacia su sucesor Osoro. Si los vaticanólogos del Nuevo Orden Mundial (NOM) intentan secuestrar al Papa Francisco, a costa de manipular su mensaje, en Madrid tenemos la versión local de Vidal y Bastante, que intentan exactamente lo mismo con el actual titular de la diócesis.

El Nuevo Orden Mundial Mundial (NOM) pretende manipular el mensaje de Francisco. En Madrid, dos pícaros progres quieren hacer lo propio con el obispo Osoro
Este dúo Sacapillos -a ver qué saco y qué pillo- ha encontrado su vía de influencia en la Iglesia madrileña y está dispuesto a ejercerla. Son peligrosos estos chicos porque saben sembrar confusión, el principal problema actual de la jerarquía.

En esta línea, creo que es un error haber suprimido la Eucaristía de las familias (Festividad de la Sagrada Familia), con la que Rouco salía a la calle a fin de año para demostrar que la Iglesia española existe y continúa teniendo capacidad de convocatoria.

Monseñor Osoro ha decidido celebrar esa Eucaristía en el interior de la catedral de la Almudena, y el dúo Vidal-Bastante aplauden. Pues no sé yo qué tiene de bueno. En condiciones de normalidad, la discreción es una pieza clave de la vida interior. En las actuales circunstancias no. En las actuales circunstancias de persecución caliente de los cristianos en Oriente y de persecución fría en Occidente, los cristianos deben salir a la calle, casi diría que deben ser exhibicionistas: no avergonzarse de su fe y no callar ni debajo del agua.

Debería haberse mantenido la Eucaristía de las familias e incluso abrir otra convocatoria de Eucaristía callejera, el 25 de marzo, Fiesta de la Anunciación y del día del niño por nacer, una Eucaristía en favor de la vida. Permitir que un par de pícaros marquen la línea del arzobispado de Madrid… cuando menos es un peligro.

Los vaticanólogos son muy liantes. Los progres de derechas y los progres de izquierda. Todos son antes clericales que cristianos. Todos están convencidos de que los papas pasan pero ellos permanecen.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com