La conclusión del informe de FEDEA (Fundación de Estudios de Economía Aplicada) sobre eficiencia en la educación es que el aspecto más eficiente para la inversión es el número de horas que los estudiantes pasan en clase.
Dicho informe señala, por ejemplo, que un incremento de entre dos y cuatro horas de matemáticas o ciencias por semana (dependiendo del país) serviría para compensar los peores resultados en estas disciplinas de los alumnos provenientes de estratos socio-económicos bajos.
Pero más horas en clase de los alumnos pueden alcanzarse con más profesores o con más horas de clase por profesor.
Dada la situación de la economía española, la decisión ha sido optar por la segunda opción. Los profesores españoles ya dedican más horas que sus colegas de la OCDE a dar clases, en concreto unas 10 ó 15 más. Con el aumento del tope de horas (de dos a cuatro según dónde estuviera el límite antes), los profesores podrán dar cerca de 120 horas más de clase al año, suponiendo que impartan todas las clases que pueden dar, lo que no siempre ocurre.
Como el tiempo total de permanencia en el centro no aumenta con las reformas, el mayor número de clases significa restar tiempo a otras ocupaciones: tutorías, preparación de clases, corrección de exámenes, horas de refuerzo. En general, la OCDE establece una relación entre menor porcentaje de horas dedicadas por los profesores a dar clase y mejores resultados.
Jesús Martínez Madrid