El grupo de Esther Koplowitz, FCC, ha presentado unos resultados mejores de lo esperado, habida cuenta de los frentes que tiene abiertos. En primer lugar, los retrasos en los pagos por parte de las administraciones públicas, especialmente ayuntamientos, en su punto fuerte: los servicios. En segundo lugar, por la recesión que sufre el sector cementero. Pues bien, Portland continúa en pérdidas pero está logrando equilibrar su estructura y sin acudir a medidas traumáticas.
El relevo ha de tomarlo la diversificación internacional, que camina a buen ritmo y que hay que apuntarlo el haber del presidente, Baldomero Falcones. Por lo demás, FCC parece especializarse en el reciclaje de aguas y residuos urbanos, más que en el sector energético.
Eulogio López
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