Por su honradez y coherencia, siento un gran respeto y profunda admiración por don Julio Anguita, nunca voté por él para presidente del gobierno, porque el comunismo está muy lejos de mi pensar, pero no me hubiera importado votarle para alcalde de mi pueblo, en una emisora de radio (no recuerdo en cual) oí a un contertulio decir que hace 5 años el señor Anguita dijo: "Si yo hubiera sido presidente de la Segunda República no me queman el segundo convento".
Traigo a colación esta cita, por la pasividad en unos casos y participación en otros de nuestras autoridades ante las constantes ofensas, incluso ataques, que estamos sufriendo los católicos, el recuerdo más lejano que con toda nitidez tengo de una de estas ofensas se remonta al año 2004 cuando un bodrio firmado por un tal Iñigo Ramírez de Haro se representó en el Círculo de Bellas Artes de Madrid en el que ya el título era una tremenda blasfemia ¡y no pasó nada!
Ahora, de un tiempo a esta parte estamos sufriendo incluso acoso y no pasa nada; el Gobierno quita los crucifijos de las aulas, incluso en contra de los padres de los alumnos, como ocurrió en un colegio de Extremadura, se quitó el crucifijo con la oposición de los alumnos por la protesta de un solo padre; en cambio, se tolera el velo y un alumno musulmán denunció a su profesor por hablar del jamón en clase, según informó Libertad Digital; con la asignatura Educación para la Ciudadanía se buscaba eliminar la asignatura de Religión y en algunos manuales se denigraba a los católicos y se ensalzaba el marxismo; por orden gubernamental, después de acosar e intentar ahogar a la comunidad benedictina, sin explicación de ninguna clase se cierra al culto la Basílica del Valle de Cuelgamuros; un ministro nos llama fascistas a quienes asistimos a la misa de las familias en la plaza de Colón, estas cosas y algunos etcéteras más son el caldo de cultivo para acciones como.
En la Universidad Autónoma de Madrid, el cardenal Rouco Varela se vio obligado a suspender una conferencia por las amenazas recibidas por unos cuantos zopencos ¡y no pasó nada!
Cuatro energúmenos descerebrados a pesar de ir a la universidad, impiden la celebración de la Santa Misa en la Universidad de Barcelona y obligan al cierre de la capilla, ¡y no pasó nada!
En España y con el objeto de ofender a los católicos, se cocinan crucifijos en un programa de televisión, y se realizan exposiciones en edificios públicos en donde se presenta a Jesucristo como homosexual e hijo de prostituta ¡y no pasa nada!
En la capilla de la Universidad Complutense de Madrid, un grupo de unas 50 cernícalas, interrumpieron el culto y en el altar se desnudaron de cintura para arriba y realizaron actos lésbicos, pues estas mastuerzas eran lesbianas ¡y no pasó nada!
Si esto lo ejecutan en una mezquita, por ejemplo en la Mezquita de Madrid en la M-30 ¿creen que tampoco hubiera pasado nada?
Pues que vayan pensando que los católicos también somos humanos y tenemos una paciencia limitada.
Hasta otro día si Dios quiere.
Juan Escribano Valero