En la mañana del lunes 28 de agosto, la petrolera hispanoargentina ha comunicado a la CNMV su intención de emprender acciones legales en defensa de sus derechos si continúa la injustificada y reiterada persecución en Bolivia. Este comunicado se produce después de que el pasado viernes se realizaran nuevos registros por parte del Ministerio Público del Gobierno en su filial boliviana, Andina. Una actuación que la petrolera hispano-argentina valora como arbitraria y carente de todo fundamento.
Además de mostrar su preocupación, Repsol sostiene que lo sucedido constituye una medida impropia de un Estado de Derecho y del respeto al orden jurídico constitucional. No obstante, la multinacional petrolera reitera su plena disposición a la negociación con las máximas autoridades de Bolivia, aunque no deja de observar una creciente preocupación por la merma de la seguridad jurídica en el país andino.