La rivalidad que mantuvieron las reinas Isabel I de Inglaterra y María de Escocia ha sido llevada al cine en otras ocasiones (la más similar argumentalmente a ésta es la del año 1971, dirigida por Charles Jarrott). El interés de esta nueva versión radica en que, a pesar de contener algunas escenas sórdidas, pone en entredicho la leyenda negra que los protestantes lanzaron, desde el principio, contra la reina católica escocesa, a la que le pusieron el “sambenito” de ser promiscua sexualmente para desprestigiarla ante sus súbditos

Nominada a los Oscar de este año en dos categorías técnicas: Mejor maquillaje y vestuario, también debería figurar la actriz Saoirse Ronan, en el apartado de mejor actriz, puesto que realiza una interpretación admirable.

El arranque nos lleva hasta el regreso de María Estuardo, viuda del rey de Francia a los dieciocho años, en su país natal: Escocia, para ocupar el trono que le pertenece. Hasta ese momento, tanto Inglaterra como los territorios escoceses están gobernados por la poderosa Isabel I. A partir de entonces, esas dos reinas rivales, en un mundo de hombres, se enfrentarán a unos acontecimientos donde las intrigas, la traición y la rebelión influirán en el curso de la Historia.

Tomando como base el libro de John Guy titulado “Reina de los escoceses: La verdadera vida de María Estuardo”, los mismos productores de Elisabeth y Elisabeth: la edad de oro (que tuvieron un importante éxito de taquilla) contrataron para este drama histórico a la conocida directora teatral Josie Rourke. Lógicamente, le dio sus propias señas de identidad al proyecto; en el que los diálogos son muy potentes. Los aficionados a la Historia descubrirán que se toma ciertas libertades narrativas en la vida personal de soberana escocesa. Algunas, como mencionábamos, realmente sórdidas, no obstante, en el guión se defiende el sentido de estado y la valentía de María Estuardo, quien sufrió por todo tipo de conspiraciones, fuera y dentro de su propia corte, desde que volvió a su reino. A este respecto, y como el enemigo más peligroso de María, emerge la figura de John Knox, el líder de los protestantes escoceses, al que da vida David Tennant, que en pantalla aparece tan siniestro como lo fue en la vida real.

Con un diseño de producción excepcional, el guión se beneficia de haber sido escrito, además de por la directora, por el dramaturgo Beau Willimon, responsable en esa parcela de Los idus de marzo y la serie televisiva “House of Cards”, que sabe imprimir una gran complejidad psicológica y, como dice la propia cineasta: “entiende el precio del poder, el tema básico de la película”.

Para: los aficionados a la Historia y a los dramas poderosos