Ninguna noticia sobre cismas en la Iglesia, ninguna pelea de cardenales y otras tonterías podrían afectarme tanto como esa pregunta, formulada por una niña de seis años. Niña europea, de un país cristiano, con cuatro años de guardería, nacida de padres cristianos… que no sabía lo que era rezar. No sólo que no supiera el Padrenuestro. Es que no sabía qué cosa era rezar.

¿Qué le pasa a la actual generación? Se muestra incapaz de trasmitir la fe a sus hijos

Recuerda aquella respuesta de San Juan Pablo II a unos jóvenes universitarios, cuando aseguraba que esta época no era ni mejor ni peor que cualquier otra, pero que albergaba un fenómeno singular: la incapacidad de una generación para trasmitir a sus hijos, no ya el depósito de la fe, sino las primigenias verdades morales, los principios éticos más elementales.

La fe y el resto de principios que le acompañan

Sobran más comentarios pero conste que si una niña de seis años no sabe qué cosa es rezar… es que el apocalipsis no debe andar muy lejos.  

Esa sí que es una verdadera señal apocalíptica