• La razón de fondo es que el norte se siente superior y se muestra reacio a compartir riqueza con el sur.
  • Pese a ello, "nuestra especificidad geográfica nos permite aportar un valor añadido al proceso europeo", destacó Rajoy en la III Cumbre de los países del sur de la Unión Europea.
Los mandatarios de los siete países meridionales de la Unión Europea (España, Francia Italia, Portugal, Chipre, Grecia y Malta) respaldaron las directrices de la negociación del Brexit, que deberán ratificarse en el Consejo Europeo del próximo 29 de abril. El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, insistió en la unidad de los 27 países que seguirán conformando la UE y recalcó que primero se negocia la retirada del Reino Unido y luego se habla de su futura relación con la Unión, e hizo hincapié, al igual que Hollande, en la necesidad de preservar los derechos de las personas. "Nuestra especificidad geográfica nos permite aportar un valor añadido al proceso europeo", ha destacado Rajoy en la declaración a los medios de comunicación que ha efectuado junto al presidente de la República Francesa, François Hollande; el primer ministro de Italia, Paolo Gentiloni; el primer ministro de Portugal, António Costa; el primer ministro de Malta, Joseph Muscat; el presidente de la República de Chipre, Nicos Anastasiades, y el primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras. La III Cumbre de los países del sur de la Unión Europea, en la que se ha suscrito la Declaración de Madrid, ha ratificado como prioridades una política de inmigración común, el crecimiento y el empleo, la protección social, la Unión Económica y Monetaria y la cooperación en materia de seguridad y defensa. Pero de lo que no se habló es de que mientras el sur del continente sí cree en la Unión Europea; el norte, cada vez menos. Y la razón de fondo es que el norte se siente superior y no quiere compartir riqueza con el sur. Y ese podría ser el principio del fin de la UE, pues el egoísmo primaría sobre la solidaridad... Andrés Velázquez andres@hispanidad.com