• Chris Sevier quiere que se reconozcan sus "derechos" después del matrimonio homosexual y las ventajas de todo tipo (vestuarios, baños) a los transexuales.
  • Presentó la demanda el 31 de agosto junto a otros tres hombres, que se definen como polígamos.
  • Los otros demandantes son tres personas a las que el mismo juez les negó la licencia de matrimonio puesto que querían casarse entre los tres.
  • Chris Sevier tiene toda la razón: ¿por qué no ha de casarse con su ordenador si está enamorado de él?
  • Es lo que tiene la 'modernidad': te saltas la ley natural en la legislación y al final acaba pasando esto…
Interesante información la de Religión en Libertad  que recoge el caso de la demanda que ha presentado el ciudadano Chris Sevier contra el Estado de Alabama por negarse a reconocer lo que él llama matrimonio con su ordenador portátil. Un caso del que la prensa de Estados Unidos se ha hecho eco… Chris Sevier se define a sí mismo como una persona que tiene una orientación sexual de "maquinista", es decir, se siente atraído por objetos, como en este caso su propio ordenador, del que dice estar enamorado. Este abogado y activista está dedicando su tiempo desde hace años para demostrar la arbitrariedad política Tal y como afirma un diario de Alabama, en su argumento asegura que si las autoridades de Estados Unidos han permitido el llamado matrimonio homosexual y están concediendo todo tipo de ventajas (vestuarios, baños) a los transexuales, él también quiere ver reconocidos sus "derechos". Sevier presentó la demanda el pasado 31 de agosto junto a otros tres hombres que se definen como polígamos asegurando que sus derechos han sido violados por el gobernador del Estado y el juez del condado de Blount, al no reconocer sus uniones. Este hombre afirma que "se casó en Nuevo México con un objeto de características femeninas" por lo que exige al juez o que reconozca su matrimonio o que le otorgue otra licencia de matrimonio. También considera que "si los homosexuales tienen derecho a casarse (...), entonces yo debería tener el derecho de casarse con mi objeto sexual preferido", en este caso su portátil Apple, compañía a la que acusa de causar su "adicción a la pornografía". Los otros demandantes son tres personas a las que el mismo juez les negó la licencia de matrimonio puesto que querían casarse entre los tres. Los jueces se defienden asegurando que la ley no les otorga en estos momentos la capacidad de reconocer la poligamia o el matrimonio entre una persona y un objeto inanimado. Pero Chris Sevier tiene toda la razón. Siguiendo las bases jurídicas que han permitido el matrimonio homosexual -el sentimiento-, ¿por qué no ha de casarse con su ordenador si está enamorado de él? Pero es lo que tiene la modernidad: te saltas la ley natural en la legislación y al final pasa esto… José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com