• Lo afirma Markus Rode, presidente alemán de 'Puertas Abiertas', tras los 44 coptos asesinados por los yihadistas este domingo.
  • El presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, decreta el estado de emergencia en el país durante tres meses.
  • Y todo ello, a pocos días de la visita del Papa Francisco, programada para los días 28 y 29 de abril.
Dos atentados contra cristianos coptos en las ciudades egipcias de El Cairo y Alejandría se saldaron el pasado domingo con la muerte de 44 personas y más de un centenar de heridos. Los atentados, protagonizados por terroristas suicidas, fueron reivindicados a las pocas horas por el autodenominado Estado Islámico. El primer ataque se produjo en la Iglesia de San Jorge, en la localidad de Tanta, al norte de la capital egipcia, y el segundo, en la Catedral de San Marcos de Alejandría. La primera explosión arrojó un balance de 26 muertos y 78 heridos, mientras que la segunda causó 18 fallecidos y unos 60 heridos, según los últimos datos ofrecidos por las autoridades egipcias. El ataque perpetrado en Alejandría tuvo lugar durante la celebración del Domingo de Ramos presidida por el Papa de la Iglesia copta, Teodoro II, que resultó ileso. Antes de conocerse la segunda explosión, el Papa Francisco transmitió sus condolencias por el atentado de Tanta durante su homilía dominical en la plaza de San Pedro: "Que el Señor convierta el corazón de los que siembran violencia y muerte, y también el de aquellos que hacen y fabrican armas". El doble atentado ha tenido lugar a pocos días de la visita del Pontífice a Egipto, programada para el 28 y 29 de abril, en la que tiene previsto reunirse tanto con el imán de Al Azhar, la mayor autoridad académica del islam suní, como con el patriarca de la Iglesia copta ortodoxa, el Papa Teodoro II. En ese contexto, el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, ha decretado este domingo el estado de emergencia en el país durante tres meses, informa RTVE. El objetivo del estado de emergencia es "proteger el país y preservar (su seguridad)", ha asegurado Al Sisi. Ha dicho que los aparatos de seguridad van a "intensificar sus esfuerzos para castigar a los criminales" que están detrás de los dos atentados, reivindicados por el grupo terrorista Estado Islámico (EI). En un llamamiento a la comunidad internacional, el presidente afirmó que esta "tiene que castigar a los países que apoyaron al terrorismo y crearon la ideología (radical) y trajeron a combatientes (a Egipto) de todo el mundo". "Ahora nosotros somos los que pagamos el precio", añadió Al Sisi, quien alabó a los ciudadanos por su resistencia y paciencia en las difíciles circunstancias que vive Egipto desde varios hace años. Los coptos, que constituyen en torno al 10% de la población egipcia (94 millones de habitantes), conviven pacíficamente con la mayoría musulmana del país a pesar de esporádicas fricciones. Sin embargo, "los islamistas radicales quieren eliminar a los coptos" de Egipto, afirma a DW Markus Rode, presidente del capítulo alemán de Open Doors (Puertas Abiertas), una organización no gubernamental dedicada a apoyar a las comunidades cristianas perseguidas. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com