• Una forma, no de obtener plusvalías, sino de reducir deuda.
  • Florentino logra quitarse gran parte de los 1.157 millones de euros de deuda asociada a esta filial.
  • Y FCC ya ha cumplido con más del 75% de su plan de desinversiones orientado a reducir su apalancamiento.

Siete años después del comienzo de la crisis -siete años ya, se dice pronto- las constructoras continúan con su proceso de desapalancamiento, lo que nos da una idea del nivel de deuda que adquirieron durante los años de bonanza económica.

Vayamos a los hechos. ACS ha notificado este viernes a la CNMV que su filial Iridium ha vendido el 80% de sus participaciones en distintos activos concesionales. Concretamente, se ha desprendido de intercambiadores de transportes de Madrid, del Hospital de Majadahonda y de la Línea 9 del Metro de Barcelona.

Y la operación de Florentino Pérez no está mal. Según el comunicado, el valor de empresa del 100% de Iridium (capitalización bursátil más la deuda menos el dinero en caja o equivalentes) es de 1.332,5 millones de euros, y ha vendido el 80% por 175,2 millones, con una plusvalía neta de 44,7 millones.

Pero, como hemos señalado antes, el objetivo no es obtener plusvalías sino reducir deuda. Y el presidente de ACS ha logrado quitarse de encima gran parte de los 1.157 millones de euros de deuda asociada a esta filial.

FCC es la otra protagonista de la jornada, al vender su división de medioambiente en Estados Unidos a la empresa Heritage-Crystal Clean por 70 millones de euros. La plusvalía, en este caso, ha alcanzado los 15,4 millones. Según el comunicado remitido a la CNMV, esta venta se encuadra en el cumplimiento de los objetivos del Plan Estratégico, puesto en marcha en abril de 2013. Desde entonces, la compañía que dirige Juan Béjar ha realizado y acordado operaciones y ventas de activos –no estratégicos- por valor de 1.800 millones de euros.

"Estas desinversiones, entre las que figuran FCC Logística y FCC Energía, sitúan el grado de cumplimiento del Plan en más del 75% de los 2.200 millones fijados como objetivo", señala el comunicado remitido a la CNMV. "El Grupo espera obtener los 400 millones restantes con el resto de activos disponibles para la venta, entre los que figuran Realia y Globalvía, en los próximos trimestres", añade la nota. El objetivo, como en el caso de ACS, es la reducción del apalancamiento.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com