Tras la emisión de la película «Unplanned» el 16 de agosto de 2021 en el Canal C8 en Francia, dos ministras, Élisabeth Moreno y Marlène Schiappa, se indignaron y se presentaron denuncias ante el Consejo Audiovisual Superior (CSA), recoge Infocatólica. 

La película «Unplanned» está inspirada en la historia de Abby Johnson, directora de una clínica estadounidense de planificación familiar, cuenta cómo la joven, confrontada con la realidad de un aborto por aspiración, elige cambiar su punto de vista y su vida.

Aunque en agosto de 2021 amenazaron: «Nuestros equipos examinarán la película emitida en antena y la examinarán con respecto a las normas legales aplicables, con el fin de determinar si ha habido una infracción de estas normas. En función de ello, el consejo decidirá o no intervenir ante el editor», añade Infocatólica. 

En España, el actual Gobierno social-comunista pretende prohibir que los provida se reúnan delante de los abortorios  a rezar o a dar información a las mujeres que libremente la acepten, antes de abortar

El Consejo Audiovisual francés (CSA) acaba de publicar su respuesta y considera que «la retransmisión de esta película, obra de ficción sujeta a la libertad de creación, no puede considerarse susceptible de generar una alteración del orden público y que su programación se enmarca en la libertad editorial de la cadena».

Sin embargo, la CSA «advierte a la cadena», considerando que el programa entraba en una categoría diferente a la anunciada. La CSA estimó que «debido a su clima que provoca ansiedad» y «la presencia de varias escenas que puedan molestar a los menores de 12 años» , la película «por lo tanto, no debió proyectarse en la primera parte de la noche durante las vacaciones escolares».

La película, emitida en horario de máxima audiencia, no es la primera polémica sobre este tema del Canal C8 de Vincent Bolloré, un católico practicante que nunca ha ocultado sus convicciones provida.

Recordemos que, -como recogió Hispanidad- en España, el actual Gobierno social-comunista pretende prohibir que los provida se reúnan delante de los abortorios  a rezar o a dar información a las mujeres que libremente la acepten, antes de abortar. La intención del Ministerio de Igualdad, por tanto, supone un atentado contra las libertades de reunión, opinión, información y culto.