No hay excusas: de los 27 países miembros de la UE, somos el que cuenta con más desempleados y donde más crece el paro. Uno de cada cuatro españoles sin trabajo es andaluz. Si a las cifras oficiales sumáramos los trabajos frágiles del Plan E y el efecto Caldera, estaríamos en los 5 millones de parados.
Los datos de paro que presenta la Encuesta de Población Activa (EPA), correspondiente al segundo trimestre del año, son más reales que los de los servicios públicos de empleo. La razón es sencilla: en momentos de crisis, la gente desconfía de que el INEM le encuentre un empleo, así que ¿para qué apuntarse? Pero cuando el encuestador le pregunta, responde: Estoy en paro y me gustaría trabajar. Pues bien, de la encuesta del segundo trimestre se deriva que hay 126.000 personas más en el paro. El dato final es de 4.137.500 personas, el 17,92% de la población activa. El dato más alto de los últimos 11 años.
Sólo en los últimos 12 meses, 1.755.900 personas han pasado a engordar las listas del paro. Supone un incremento del 73,7%. Lo mires por donde lo mires, unas cifras que, de no ser por los subsidios públicos que amortiguan la situación, podrían provocar un estallido social.
Además, ya hay 1.118.300 familias con todos sus miembros en paro, un 4,6% más que en el trimestre anterior y un 102% más que hace un año. Si a los parados oficiales les sumamos los del maquillaje estadístico Caldera, cerca de 500.000 y los 350.000 empleos artificiales creados por el plan E, ya estamos en los 5 millones parados. Si, además, desestacionalizamos el dato, adulterado por la campaña veraniega, la cifra es mucho peor que la suavización que ha pretendido vendernos el ministro Corbacho. Por eso, el titular ministro de Trabajo se coloca la venda antes que la herida y afirma que los meses de septiembre y octubre van a ser meses malos. ¡Y tan malos!
Mientras, la prensa internacional arremete contra el presidente del Gobierno español y su política económica. Tiene su lógica, dado que, de los 27 países miembros de la Unión Europea, el que más sufre el paro es España y, además, somos uno de los países en los que ese paro crece a mayor ritmo. Mención especial merece Andalucía, una tierra donde uno de cada dos jóvenes está en paro. De cada cuatro españoles sin empleo, uno es andaluz.
