David Taguas, ex director de la Oficina Económica de Moncloa, considera que se debe endurecer la reforma laboral y reducir más las pensiones

 

La guerra civil en el PSOE continúa.

El presidente de la patronal de grandes constructoras Seopan, David Taguas, también le ha enmendado la plana al gobierno de Zapatero. Si solamente fuera eso, podría ser una crítica más, pero si se tiene en cuenta la comparecencia de ayer de MAFO, en el bando de presuntos amigos socialistas las cosas están muy duras.

David Teguas fue compañero de armas de Miguel Sebastián cuando éste era el director de Servicios de Estudios en el BBVA y antes de que lo echara FG. Como es bien sabido, Miguel Sebastián se convirtió después en uno de los ideólogos de Zapatero y luego fue el director de la oficina económica de Moncloa. Cuando Sebastián fue a luchar contra Gallardón por la alcaldía de Madrid, fue Taguas quien le sustituyó y ha sido durante años el ideólogo del zapaterismo económico.

Taguas es por lo tanto un personaje cuyas declaraciones no pasan desapercibidas, por lo que su afirmación de que las medidas tomadas por el Gobierno en las reformas no son suficientes, es digno de tener en cuenta.

Pues también él ha pedido al Gobierno que ignore a los sindicatos (dice que deben ser escuchados y consultados, pero no formar parte de la negociación, que es como ignorarlos) a la hora de negociar la reforma de las pensiones.

Pero si le hacen caso, habrá otro problema ya que es bueno recordar que tras la huelga general, los sindicatos avisaron de que no hablarían de las pensiones si no se hacía antes de la reforma laboral, y parece que eso no a ser posible.

Así que estas declaraciones, unidas a las de MAFO durante la comparecencia de ayer en las que manifestaba que las previsiones del Gobierno no eran suficientes, nos presentan una crisis política en el socialismo en materia económica, que también se percibe en otros campos. Y no hay más que ver las consecuencias de las primarias de Madrid. Tras la derrota de Trinidad Jiménez, todo el mundo ha salido a escena: Blanco para defender a Gómez (cuando él mismo había apostado por Trinidad Jiménez), Alfonso Guerra para señalar con el dedo a los derrotados (Rubalcaba y Zapatero) y ahora De la Vega, que discrepa de Guerra, para defender al presidente. Como ya decía ayer Hispanidad, empiezan las prisas para salir en la próxima foto. Así que a correr y todos a sonreír.

Juan María Piñero

juanmaria@hispanidad.com