• Y Sáenz de Santamaría recuerda al PSOE que inició esa reforma en 2009 y cuestionando que nos dirigimos al mundo "poniéndonos a todo el universo en el cogote".
  • El ministro de Justicia aclara que él no ha excarcelado a terroristas, narcos y demás ralea, sino el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
  • Y añade que el Tribunal Supremo tendrá que resolver esos casos.
  • El debate llega también al Corredor Mediterráneo y Ana Pastor replica al PSOE que "no logró poner ni una traviesa".
  • La ministra de Fomento asegura que el ancho de las vías será internacional, pero se resiste a poner plazos al desarrollo de las infraestructuras.
  • El ministro de Hacienda, a lo suyo: insiste en que no ha habido amnistía fiscal y que se afloraron 40.000 contribuyentes.

Ruiz-Gallardón (en la imagen), astuto, ha encontrado en la mañana de este miércoles el mejor argumento para defender su reforma sobre la jurisdicción internacional. Lo ha hecho, consciente, como le ha recordado la diputada de UPyD, la periodista Irene Lozano, de que se ha topado con la oposición de 13 de los 16 jueces de la Audiencia Nacional, que no son, precisamente, ignorantes en la materia. Como ha denunciado Lozano, además, el balance de su gestión es demoledor: sólo ha servido para "liberar terroristas y a los peores asesinos de la España negra". Pues bien, ¿qué le ha contestado Gallardón El ministro, en ese tono sereno tan suyo (todo le altera, pero lo disimula bien), le ha replicado que todo el trabajo en este sentido que han hecho los funcionarios españoles -también policías y fiscales- se ha saldado en una única condena, la del represor argentino Adolfo Scilingo, menor que la de su país y con fraude de ley. El globo pincha: la ideas, aunque sean hermosas, deber tener más consistencia.

Gallardón se ha ceñido a los hechos para cargarse de razón. Bueno, y respecto a las excarcelaciones de esa gente tan peligrosa, que ha sido decidida por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, no por él, ha dicho que el Supremo tendrá que resolver esos casos.

También ha intervenido sobre este punto la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría para contestar a su tocaya Soraya Rodríguez, que ha insistido en la excarcelación de los 43 narcotraficantes que ha facilitado la reforma de Gallardón. Y además, ha dicho Rodríguez, "garantiza la impunidad de los autores de los peores crímenes y de las violaciones de derechos humanos y abandona a las víctimas españolas de estos delitos".

Eso y dañar la imagen de España es lo mismo, ha concluido Rodríguez. Bien, la vice le ha replicado, leyéndole la cartilla. Le ha reprochado que fue el PSOE el que inició esa reforma, en 2009, y que fue en ese periodo cuando el senador del PSOE Arcadio Díaz Tejera, defendiendo las limitaciones de la jurisdicción internacional, dijo (sic): "Es necesario evitar una especie de neocolonialismo jurídico por el que los países desarrollados le dicen a otros lo que tienen que hacer, dirigiéndose a todo el mundo 'urbi et orbi', poniéndose a todo el universo en el cogote".

Para la vice, además, no es cuestión menor que tras esa reforma, nos parecemos más a las legislaciones de países como Francia, Alemania o Italia, que no tiene un ordenamiento "chapucero" precisamente.

Segundo temazo de la sesión del control: el Corredor Mediterráneo. La ministra de Fomento, Ana Pastor, se ha defendido con un ataque, ante los numerosos reproches de la bancada del PSOE y de CiU. "Para desastre y ridículo el suyo, que no lograron poner ni una traviesa", ha contestado a los socialistas. Ha sido la conclusión a una larga disputa sobre el desarrollo de esas infraestructuras, que tanto preocupan a PSOE y a CiU (lo convirtió en tema de campaña en las últimas europeas). En fin, han sobrevolado el ancho de las vías de ese corredor y los plazos de ejecución de las obras.

Ha atacado el diputado del PSC Francesc Vallés, que le ha echado en cara a Pastor que, tras visitar personalmente las obras, ha comprobado que "lo que están colocando son vías de ancho ibérico". En otras palabras, que "el modelo comprado no resiste la compatibilidad entre el ancho ibérico e internacional". La ministra le ha contestado que se equivoca, que "en el Corredor Mediterráneo a su paso por Tarragona por supuesto que van a circular trenes de ancho ibérico e internacional o UIC". Y que, además, entre otros casos, en Castellón- Vandellós se instalará ancho internacional en una de las vías y ancho mixto en la otra. La idea, en resumen, es facilitar la adaptación al ancho internacional progresivamente a sus trenes y sus instalaciones.

Pere Macías, de CiU, ha atacado con los retrasos en algunos tramos, que están condicionando las inversiones de empresas privadas. Pastor le ha contestado con cifras: se han destinado 3.438,5 millones de euros y la situación que se encontró cuando llegó es que "en la inmensa mayoría de tramos no había ni proyecto ni obras en marcha". Pastor, sin embargo, no ha dado fechas para finalizar los tramos y en tono resignado ha dicho que "sabemos que hay órdenes a las empresas de no empezar y eso nos ha preocupado muchísimo". Vaya por Dios.

También ha tenido su hueco en el debate el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para negar, una vez más, que en España se haya ha aprobado una amnistía fiscal, sino una regularización tributaria extraordinaria en condiciones diferentes de una regularización ordinaria y que gracias ello afloraron 40.000 contribuyentes que antes no tributaban y ahora sí. Se lo ha echado en cara, también una vez más, el portavoz socialista de Hacienda, Pedro Saura, que cree que esa amnistía fiscal "no ha sido útil para la lucha contra el fraude y la corrupción".

Mariano Tomás

mariano@hispanidad.com